2 de marzo de 2007

Regresión lineal simple

El miércoles 28 de febrero, me encontré por primera vez con ese tipo cara a cara. Con ese tipo que me hizo llorar tantas veces, ese que supo acompañarme desde mi más [no]tierna adolescencia, ese que con sus letras me ponía la piel de pollo. Ese tipo, ese rubio canadiense que inundaba una habitación con sus acordes y te transportaba a otra dimensión color romance.
Qué diablos, ¿por qué hablar en pasado si todavía logra esas cosas?.
Años después, sigo llenándome de escalofríos cuando lo escucho. Y con un merecido llanto de emoción, canté con él los acordes de; a mi humilde parecer; LA balada de los años ochenta.
Damas y Caballeros. 10 PUNTOS para el recital del querido Bryan Adams, en el Luna Park.
Sin lugar a dudas, una elección de canciones de la madre que te parió, y un final espectacular para ese tipo que te hace temblar hasta la punta del pie.
Sin más, les dejo el video de la canción que creo, es ícono de este muchacho. Enjoy!

PD: Y así viejo y todo, te seguimos dando (Era lo que pensábamos más de uno xD)

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