7 am. Madre se aparece en la habitación a grito pelado, de que padre estaba mal herido, que llamá remis, que cambiate, que rápido, que la sangre, sarasa.
Claro...una estaba dormida hacía como mucho 3 hs y media, y encima soñando alguna pelotudez sobre vampiros, dado que todas las noches no me duermo si mínimo no leo 1 horita o 2 del último libro de la saga de Crepúsculo. Definitivamente fue mucha información junta para tan poco cerebro despierto. Y también es chocante levantarte de un salto, y ver a padre con la cara ensangrentada y una toBalla tapandole el ojo (Se abrió la ceja).
Hospital, a las corridas.
"¿Emergencia? ¡Ya llamo al cirujano residente!". (Los conceptos de "guardia" y "emergencia" no están bien definidos en el Htal. Vélez)
7 y 10.
7 y 20.
7 y media.
-Me dolía ya el brazo de sostenerle la venda a padre-
7:40.
7:50.
"¿Dónde están los cirujanos?. Si fuera Mirta Legrand esto no pasaría".
"¿Sabés que voy a tener que tomar ahora?. Mate cocido".
"Me voy a hacer el mareado y desmayado, vos no te asustes, a ver si consigo que llamen a algún boludo".
"Ah que tal doctor, seguro que si viene Pampita vienen más rápido, ¿no?".
Es admirable esa cosa que tiene de aún cuando se siente medio como el tohor y tiene una abertura en la cara "de más", sigue hablando pelotudeces. No deja de ser un zopenco.
Y matómil la mala onda del médico, que encima viene casi una hora después que lo llaman. Sí, todo bien con que tenés recorridas y qué se yo, pero en una guardia de hospital no podés NO tener a nadie atendiendo.
Cuando me fui, ya había 7 personas esperando afuera.
En fin.
"La ciencia no se toma vacaciones". Yeah, sure.
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