Quizá algún dibujito pelotudo de los míos, alguna fotito, ¡algo!....
Y resulta que abro la puerta de mi cuarto esta mañana y en mis zapatillas me encuentro con $35, aún sin siquiera haberles dejado pastito y abua....
¡Me cagaron bien!
...¿Y ahora que hago?...Bueno, si, eso puede ser, está bien, lo digo. ¡Gracias Reyes!
(El año que viene los agarro, ya van a ver. Igual, todavia estoy esperando vengarme por el Talco que me dejaron hace dos años juntos a mis zapatitts....¡No intenten sobornarme!)
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